El Complejo Cultural Fábrica Imbabura, ubicado en la parroquia Andrade Marín, cantón Antonio Ante, fue el escenario para el III Encuentro de Voces Diversas. Alrededor de 200 representantes de más de 20 pueblos y nacionalidades de todo el país se congregaron para hablar de participación y Democracia Comunitaria.
La jornada inició con el desfile de la interculturalidad que partió desde el parque central de Andrade Marín y finalizó en la Plaza Artesanal del Sol en La Fábrica Imbabura, donde el pueblo Natabuela de la Provincia anfitriona realizó el ritual de agradecimiento.
El doctor Juan Pablo Pozo Bahamonde, Presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), manifestó que el encuentro se basa en tres ejes fundamentales. El primero, es declarar la lucha frontal contra toda expresión de racismo. “Es necesario alzar la voz para denunciar cualquier tipo de discriminación”, dijo Pozo.
El segundo aspecto se refiere al reconocimiento de los derechos individuales y colectivos de los pueblos y nacionalidades de todo el país; y por último promover las escuelas de liderazgo al interior de las comunidades, con la finalidad de fortalecer la formación cívica y democrática.
Por su parte el director ejecutivo del Instituto de la Democracia, doctor René Maugé, expresó que a través de estos encuentros se quiere volver la mirada a los pueblos y nacionalidades. “Este será un evento intercultural con el objetivo de forjar un destino común en resolver los problemas que tiene la nación ecuatoriana”, apuntó.
La consejera Luz Haro, hizo hincapié en la necesidad de fortalecer la democracia a través del respeto, la armonía y la unidad. “Debemos potenciar lo que representan los pueblos y nacionalidades para el desarrollo del país”, manifestó la concejera.
El director de la Delegación Electoral de Imbabura, abogado Santiago Vallejo Vásquez, agradeció la presencia de las autoridades nacionales del CNE y la respuesta de los pueblos a esta convocatoria. “Debemos recordar que la democracia comunitaria está reconocida en nuestra Constitución y debemos trabajar en ella para fortalecerla”, expresó
Durante el encuentro se habló de los mecanismos de participación y democracia comunitaria que se vive al interior de los territorios habitados por los diferentes pueblos y nacionalidades. Representantes de cada provincia tuvieron la oportunidad de exponer su realidad y experiencia.
Desde la provincia de Napo llegó Juan Miguel Chimbo, Kichwa amazónico quien relató que en su comunidad la democracia es un ejercicio diario, pero que no se lo visibiliza. En ese sentido agradeció al CNE por la apertura. “Es ahora que a través de estos encuentros nos permiten mostrar la forma de vida y de organización de los pueblos amazónicos”, comentó Chimbo.
Al encuentro llegaron también desde la provincia de Pastaza los representantes del pueblo Shuar. Mireya Tsakimp es una de ellas y destacó la importancia de compartir con los otros pueblos sus conocimientos. “Cada pueblo tiene sus formas de elegir a sus autoridades, al conocerlas enriquece nuestros saberes y los demás también aprenden nuestra costumbres”, dijo Mireya.
Al cierre del evento se firmó un acuerdo enfocado en los ejes del encuentro:
- Conforme lo establece la Constitución y la Ley, el CNE y los representantes de los pueblos trabajarán para luchar contra todo tipo de discriminación.
- Impulsar la formación cívica y democrática y promover que las organizaciones políticas tengan como labor fundamental fomentar su identidad cultural.
- El CNE impulsará a través de políticas públicas y prestación de servicios la construcción del Estado y mantenimiento de la interculturalidad.
- El CNE a través de proyectos, programas u otros mecanismos asegurar y fomentar la participación de los pueblos y nacionalidades en la vida democrática del país.
La jornada finalizó con una visita al pueblo Natabuela para conocer de cerca sus costumbres, tradiciones y procesos de elección de sus autoridades. En este espacio, el doctor Juan Pablo Pozo Bahamonde manifestó que a través del Instituto de la Democracia se gestionará la elaboración de un proyecto para levantar la memoria histórica de este pueblo ancestral.
De esta manera se vivió en Imbabura un espacio de diálogo con los pueblos y nacionalidades amazónicas, de la serranía y de la costa ecuatoriana.